El artista, nacido en 1947, presentó 52 pasteles (1984-1986) sobre papeles que llegaban a alcanzar el metro de ancho. Obras figurativas que representaban encuentros entre hombres y mujeres que sugerían lo sexual sin manifestarlo explícitamente. Los contactos entre cuerpos eran ambiguos, ignorando el que mira si la obsesión implicaba gozo o angustia.